Academias De Pintura En Medellin Cerca De Mi

4worldlovers: Alonso Meneses Jaramillo nació en Medellín en 1964, es maestro en Artes Plásticas de la Universidad Nacional de Colombia y licenciado en Educación de Artes Plásticas de la Universidad de Antioquia. Su trabajo pictórico se caracteriza por la gestualidad y lo matérico de sus obras con gran influencia del expresionismo y el informalismo, los cuales se ambientan con un cromatismo nacido de su vivencia en el trópico y de su experiencia en el color publicitario y la cultura de la moda en su Medellín natal. Su obra está ubicada en colecciones particulares de Colombia, Estocolmo, Buenos Aires, Barcelona, Roma, Nueva York, Miami y Budapest.

La mirada delirante que a diario esculca en la infinidad de los rostros efímeros, aparentemente iguales, (como todo lo humano, aparente), esa mirada pretende relacionar estos miles de gestos, agrupar y clasificar en ocasiones, descifrar en otras y a veces sencillamente, desvelar los monstruos que guarda cada epidermis.

Como una condición ineludible dentro de cualquier sociedad, las dinámicas que aparecen en el trasegar del poder político, sus altibajos y desaciertos, son el soporte temático para abordar esta constante universal de lo efímero de los poderes sumado a los límites casi invisibles entre lo sagrado y lo profano.

Como grandes temas recurrentes de siempre, aparecen las especies animal y vegetal bajo dos miradas distintas, una personal y la otra colectiva, se hace necesario como primero, organizar el inventario de todos los animales metafóricos que subyacen en el insondable universo que nos ofrece el husmear por la condición humana y sus múltiples variables simbólicas y gestuales y segundo, responder a un reconocimiento de nuestra idiosincrasia local, interpretando la gran variedad de matices y formas de las exuberantes fauna y flora colombiana y latinoamericana.

Es una serie de acciones pictóricas caprichosas marcadas por la libertad en donde se avizoran los recuerdos y la fantasía, surgiendo así una serie de espacios y lugares muy personales, llenos de fragmentos formales únicos que han permanecido en la retina del tiempo y se anudan ahora con el presente y volverse un híbrido visual selecto que permanece solo por tener en sus partes determinadas características de color, textura y forma, todo ello formando una parte de un todo autónomo en expresión y significado.

Es una mirada futurista de la reacomodación del globo terráqueo frente al uso despiadado del hombre al planeta y a los recorridos de las grandes migraciones que hacen oscilar estrepitosamente la geopolítica. Apunta a un imaginario que pone a disposición los planetas vecinos a la tierra como refugios potenciales y en ellos fantasear especies de habitantes y sus respectivas condiciones de vida.

Cabalgantes figuras entre los rojos secos y las lágrimas de mundo pintadas sobre un lienzo, fuerzas migratorias, pinceladas nacidas entre los bermejos mundos de color cenizo y azul destello. Una fuerza nacida de un acto compulsivo de un orden exquisito pero invisible, el caos intimista, la unión entre lo espontaneo y lo pensado, juego de tensiones y morada licenciosa entre los sueños. Moradas, nidos, oquedades, largos jinetes en estampida hacia la nada, sombras de apaciguado semblante entre las líneas borrosas y calientes, barcos casa varados en la sangre, seres dignificados salidos de la esfera, uno podría decir que Alonso no pinta, sólo llama seres, los hace en el color y los recrea, Alonso juega con sus pinceles a un hacedor de mundos que lo llaman desde adentro.